Queridas
presentaciones,
No hace falta
ser asÃ, ¿no te parece? Digo, ya es lo suficientemente incómodo por ser la
primera vez que nos vemos, además tenés que agregarle las partes de «hablar de
uno mismo». Con lo mal que se me da eso…
Cada vez que me
piden que me presente mi cabeza automáticamente queda en blanco. Nada ahÃ
arriba, blanco total, ni siquiera puedo modular bien. Viste cuando tenés que
escribir tu CV, ¿no?, y tenés que poner tu nombre, edad, educación, lo básico.
Pero entonces… entonces tenés que poner cosas en las que sos buena o te
destacás pero tenés que tener tÃtulo para eso, porque por ejemplo, no podés
decir que sos buena en inglés y podés traducir sin un certificado que pruebe
que lo podés hacer, a pesar de poder hacerlo sin problema. Pero… ¡soy buena
comiendo, y durmiendo, y mirando pelÃculas, y leyendo libros y escuchando
música (soy una persona muy dedicada)! Pero, nada de eso sirve para mucho, ¿no?
Además, tampoco tengo un certificado para nada de eso. Entonces me rompo la cabeza
pensando en algo que en lo que no me va tan mal y lo agrando. Y ahà estoy yo,
tratando de sacar cosas donde sé que no hay demasiado con tal de tener algo,
¡lo que sea! ¿Cuenta como engaño? ¿Cuenta si mis intenciones son buenas… para
mà al menos?
La cosa es que
al menos ahà tengo tiempo para pensar y editar mis palabras, cuando estamos
cara a cara y conocés a alguien en ese momento y te empiezan a preguntar cosas
mi cerebro empieza a trabarse. Va más o menos asÃ:
¿Que cuántos años tengo? ¿Hoy
o…? ¿Qué estoy estudiando? Ja, esa,
esa es una muy buena pregunta… ¿Qué significa este tatuaje? Prefiero
no contarlo, es personal, pero siempre termino explicándolo (o parte de la
verdad). ¿De dónde soy? Carajos. Y después viene la tan temida pregunta
de: ¿Qué
tipo de música escuchás? Y,
bueno, escucho de todo un poco. Ahà se quedan mirándote espirando que
elabores. Bueno, más que nada rock
alternativo y… kpop. ¿Qué es eso?
Música coreana. ¡Eh, pero no entendés
nada! SonrÃo, haciendo mi mejor esfuerzo por no ser grosera y mantener
mis niveles de asocialidad al mÃnimo. Y,
no, pero entiendo lo suficiente, la música es un idioma universal, si
escucharas canciones en otro idioma lo entenderÃas. Pero cuando quiero saber el
significado de las letras todo lo que hago es activar los subtÃtulos y, ¡puf!
Ya sé sobre lo que cantan.
¿Viste cuando
te ponés nerviosa y hablás demás? Siempre
me pasa, y soy una de esas personas que casi ni hablan. Cuando hay más personas
es más fácil librarse y no hablar, pero cuando solo somos yo y la otra persona…
incómodo.
Bueno, como
sea, por más que quisiera que las presentaciones dejaran de existir, no lo van
a hacer. Mis prácticas en presentaciones van tan mal como al principio, pero
capaz, algún dÃa, por algún milagro divino, pueda hablar con normalidad con
otro ser humano que no conozco.
Atte., Jane Doe.
No hay comentarios.:
Gracias por dejar tu opinión :)